La Cámara de Apelaciones en lo Penal N° 1 le otorgó a Ricardo Anselmini salidas transitorias los domingos, cada 15 días. Está condenado por el abuso sexual y el crimen de la adolescente, ocurrido en febrero de 2001.
La Cámara de Apelaciones en lo Penal N° 1 le otorgó el beneficio de las salidas transitorias a uno de los policías condenados a reclusión perpetua por el crimen de Natalia Melmann, la adolescente de 15 años asesinada en febrero de 2001 en Miramar.
Los jueces Esteban Viñas y Gastón De Marco resolvieron otorgarle el beneficio a Ricardo Anselmini, quien fue hallado culpable de secuestrar, torturar, abusar y asesinar a la menor de edad; y que, por el tiempo transcurrido en prisión, había ya solicitado ser liberado con anticipación.
Viñas y De Marco, en esta oportunidad, le otorgaron a Anselmini el beneficio de salidas transitorias, para que pueda abandonar la cárcel un domingo cada 15 días.
Los argumentos de los jueces fueron que estaban cumplidos los aspectos objetivos para que Anselmini tuviese salidas transitorias: el tiempo que lleva de encierro, los informes dentro del penal son sobresalientes y desde el Servicio Penitenciario recomendaron salidas transitorias progresivas.
La resolución fue repudiada por la familia de Natalia Melmann, desde donde adelantaron que apelarán la medida, por lo que Anselmini no podrá gozar del beneficio hasta que no resuelva la Cámara de Casación Penal de la Provincia de Buenos Aires.
“Por el amor seguiremos luchando, el Estado es responsable“, expresaron en un comunicado.
Cabe recordar, que en enero de 2023 la Sala II de la Cámara de Apelación y Garantías marplatense rechazaron el pedido de libertad condicional presentado por Anselmini. En esa oportunidad, el voto de los magistrados fue dividido y quien había votado para concederle el beneficio había sido el juez Esteban Viñas.
Además de Anselmini, en el primer juicio por el crimen de Melmann también fueron condenados a prisión perpetua como coautores del femicidio otros dos policías: Oscar Echenique (62) y Ricardo Suárez (59). A los tres les atribuyeron los delitos de “rapto, abuso sexual con acceso carnal agravado por la pluralidad de personas y homicidio criminis causa”.
El hecho ocurrió el 4 de febrero de 2001, cuando Natalia fue obligada a subir a una camioneta de la Policía bonaerense y llevada a una casa ubicada en el extremo sur de la ciudad de Miramar.
En esa vivienda, fue torturada, abusada sexualmente y estrangulada con el cordón de una de sus zapatillas.
Los tres policías trasladaron luego el cuerpo al vivero Florentino Ameghino, donde lo ocultaron con un montículo de hojas, pero fue hallado cuatro días más tarde durante uno de los tantos rastrillajes que se realizaron por esa zona.
El crimen provocó la reacción de la comunidad local, que encabezó junto a los familiares y allegados de la adolescente múltiples marchas para pedir por el esclarecimiento del caso y produjo incluso un impacto político: el entonces presidente, Fernando De la Rúa, se reunió pocos días después con los padres de la víctima en Miramar.
En septiembre de 2002, el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 2 de Mar del Plata condenó a Echenique, Anselmini y Suárez a prisión perpetua y a 25 años de cárcel al exconvicto Gustavo “Gallo” Fernández, por su participación en el secuestro, aunque la pena fue reducida luego a 10 años de prisión.
En tanto que en junio de 2018 se celebró un nuevo juicio a un cuarto policía, Ricardo Panadero (63), imputado como coautor de “privación ilegítima de la libertad por el uso de violencia, abuso sexual agravado por acceso carnal y por el concurso de dos o más personas, y homicidio doblemente agravado por haberse cometido para lograr la impunidad de los coautores de un delito anterior”.
Panadero fue absuelto en ese proceso porque los jueces consideraron que no pudo acreditarse la acusación, pero el fallo fue apelado por la fiscalía y por el abogado de la familia de Natalia.
El 13 de noviembre de 2019, la Sala III del Tribunal de Casación bonaerense anuló esa absolución y ordenó la realización de un nuevo proceso, que se realizó en mayo de 2023 en el que Ricardo Panadero también fue condenado a prisión perpetua por ser coautor de los delitos de “privación ilegal de la libertad agravado, abuso sexual agravado y homicidio doblemente agravado, por el concurso premeditado de dos o más personas y por ser cometido para asegurarse la impunidad“.